A la mujer le imputan cinco cargos, entre ellos el de “poner en peligro el bienestar del menor”. Se encuentra bajo arresto y va a comparecer ante un tribunal el próximo 7 de marzo.
El pasado 3 de noviembre Judy Viger organizó una fiesta en una pista de bolos para su hijo adolescente. Contrató y pagó a dos bailarinas de 'striptease', que realizaron danzas eróticas frente a él y frente a otros invitados, todos menores de 17 años. El más joven de ellos tenía trece.
Ella misma indicó en su cuenta de Twitter que “quiere a sus hijos más que cualquier cosa en el mundo”. “¿Quién es la gente para juzgarme? —se pregunta—. Solo Dios puede juzgarme”.
Viger ha recibido a través de este mismo medio decenas de mensajes de apoyo. Algunos adolescentes confiesan que quisieran tener una madre como ella. Sin embargo, si el tribunal la encuentra culpable, Judy afronta la perspectiva de pasar un año en prisión.